El segundo pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) sesionó en La Habana presidido por su primer secretario, Raúl Castro.
De acuerdo con el Noticiero Nacional de Televisión, la cita se inició el pasado 30 de julio, Día de los Mártires de la Revolución, con un minuto de silencio en homenaje a los revolucionarios Frank País y Raúl Pujols, así como a los que cayeron a lo largo de las luchas del país.
A continuación, José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del PCC, dio lectura a un informe en el cual se explican las acciones realizadas por la organización en cada provincia para dar continuidad al análisis de los temas debatidos en el VI Congreso del Partido.
Además, crear las bases para la implementación de los Lineamientos de la Política Económica y Social y preparar la Conferencia Nacional que se celebrará el próximo 28 de enero.
Machado Ventura explicó que se han trabajado manteniendo el principio de que el Partido no debe asumir otras funciones y misiones que las establecidas en sus estatutos y documentos normativos.
Enfatizó en que esta organización tiene el deber de llevar un control efectivo de la actividad económica en primer lugar para alertar a tiempo y con argumentos sólidos lo que pueda estar afectando el cumplimiento del plan o cualquier otra tarea de importancia social desde la base hasta el más alto nivel.
Igualmente, particularizó en la necesidad de exigir por que cada uno -sea o no militante- haga lo que realmente le corresponde.
En este sentido, fue preciso al señalar que no se aceptarán autocríticas cuando estas sean no más que puras justificaciones; tampoco se admitirán compromisos que pasan de un año a otro y no se cumplen, ni por la administración ni por el Partido.
Por ello insistió en la urgencia de demandar con firmeza que se conozca por qué no se hizo lo necesario cuando correspondía, quiénes son los responsables y qué se ha concebido para rectificar.
Además, cuáles son los resultados hasta el momento y en qué tiempo se resuelve la situación, para acto seguido ejercer el verdadero papel de control que corresponde.
El segundo secretario informó también acerca de la realización de las asambleas provinciales del Partido, los plenos ampliados de los comités municipales, las reuniones de secretarios generales de las organizaciones de base y el proceso que se desarrolla en los núcleos de los diferentes centros de trabajo.
En todas estas reuniones, dijo, han sido abordados oportuna y críticamente los diferentes problemas que, teniendo en cuenta las particularidades de los territorios, afectan la marcha de la economía.
Del mismo modo en estos encuentros se ha coincidido en la necesidad de ajustar la captación y atención de los dirigentes a las circunstancias actuales para incrementar su vínculo con las masas y con ello eliminar los métodos burocráticos y la falta de creatividad.
También la tendencia al reunionismo, la pasividad y el conformismo que caracterizan a muchos dirigentes y solo los conduce a ser simples ejecutores de lo dicho por el organismo superior.
Para enmendar los problemas que hoy se suscitan en la base urge en primer lugar cambiar la forma de razonar y actuar de los dirigentes, sean del Partido, el Estado o el gobierno, dijo.
Finalmente, llamó la atención sobre la necesidad de consolidar cada paso y medida que se adopte, lo cual permitirá ser consecuentes con las decisiones tomadas por el VI Congreso.
De igual forma, el miembro del Buró Político Marino Murillo, jefe de la Comisión Permanente de Implementación y Desarrollo, presentó al pleno un resumen sobre el proceso de aplicación de los Lineamientos aprobados en el VI Congreso.
Además, la marcha del perfeccionamiento funcional y estructural del gobierno y la administración central del Estado en sus distintas instancias.
En este sentido, el también vicepresidente del Consejo de Ministros explicó sobre los principios en los que estará basada la proyección quinquenal de trabajo de la Comisión y las tareas actualmente en desarrollo.
Igualmente, las decisiones económicas adoptadas que no implican nuevas normativas jurídicas y las políticas cuyas bases están en estudio y elaboración.
Murillo enfatizó que el trabajo de la Comisión no sustituye la responsabilidad institucional de ningún organismo ni entidad, y aseguró que como principio la Comisión escuchará todas las opiniones que se emitan sobre un tema con el objetivo de llegar al consenso.
Al respecto, Raúl Castro fue enfático al señalar que cualquier discrepancia existente será analizada sin desecharla de golpe y con ello garantizar la libre discusión para que cada quien opine lo que piense y desee.
El pleno del Comité Central también fue informado por el miembro del Buró Político y Ministro de Economía y Planificación, Adel Yzquierdo, sobre la marcha de la economía en el primer semestre, aspecto en el cual fueron repasados los tópicos y expuestos en la pasada reunión del Consejo de Ministros.
Acerca de la confección del Plan, Raúl Castro reiteró la necesidad de preparar a quienes están encargados de elaborarlo, pues como se ha demostrado en estos últimos tiempos todavía persisten deficiencias que en muchos casos están provocadas por desconocimiento.
Una vez más el primer secretario del Partido insistió en la importancia de cambiar métodos y estilo de trabajo que, al no estar acordes con los momentos actuales, impiden en muchos casos superar errores.
No podemos permitir que incomprensiones de ningún tipo obstaculicen la gigantesca tarea que tenemos por delante, precisó.
(Con información de Prensa Latina)